Hago de Mabel Rivera 30 años más joven. Hago de una de las actrices más molonas de nuestro país. Hago un personaje de época que camina por las calles de Santiago de Compostela en un lluvioso enero y que tiene un encuentro que marca para siempre la vida de los protagonistas... Mi partenair es Mighello Blanco. Él hace de escritor y es Federico Luppi treinta años atrás.
Espero que esta película tenga una larga vida porque es maravilloso que un director vuelva a llamarte para ofrecerte un papel en una película que ha sido rodada prácticamente en su integridad en Argentina, con Federico Luppi, Darío Grandinetti y Antonella Costa; es maravilloso que te llamen para trabajar de nuevo y sobre todo, es maravilloso que te diga: "No hay dos sin tres".
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